Airbus quiere a Dassault en su proyecto de futuro avión de combate.

Airbus quiere a Dassault en su proyecto de futuro avión de combate

Con Francia o será irrealizable. Es decir, aliados con la compañía aeronáutica Dassault (fabricante del Rafale) o no habrá proyecto. Esa es la filosofía con la que Airbus Defence & Space encara su Futuro Sistema Aéreo de Combate (FCAS). Así lo transmitió en Toulouse su responsable de aviones militares, el español Fernando Alonso, quien en un encuentro con la Prensa el pasado viernes fue claro al respecto: «Espero que Francia se involucre. Tenemos que hacer esto en Europa, donde no hay sitio para dos o tres sistemas de avión de combate». Este es uno de los debates venideros en la industria de defensa europea: ¿cuál será el avión que sustituirá a los F-18 españoles, Tornado alemanes o Mirage-2000 franceses en diez años? Algunos países europeos ya han optado por producto estadounidense, entrando en el proyecto de Lockheed Martin del F-35 «Lightning» II.

Por ejemplo tenemos a Italia y Reino Unido (fabricantes del Eurofighter junto a Alemania y España), Holanda, Dinamarca o Noruega. Es decir, estos países ya se alinearon con el proyecto de la estadounidense Lockheed Martin para la renovación de su flota de cazas más veteranos. Sin embargo, países como Alemania, Francia o España aún no han decidido qué avión de combate sustituirá a esa segunda flota de cazas. Aunque se renueve dentro 15 ó 20 años, este tipo de decisiones se deben comenzar a pensar ya. No en vano, un ejecutivo de Lockheed Martin reconoció en marzo que se encuentra en conversaciones con España respecto al F-35, y no sólo para reemplazar al F-18 del Ejército del Aire sino también para renovar los 12 Harrier de la Armada Española (ahí es la única oferta posible en el mercado).

PRECIO PROHIBITIVO Y PROBLEMAS DEL F-35
El Eurofighter ha sido hasta ahora el avión de combate desarrollado por Airbus DS / EJÉRCITO DEL AIRE

Sin embargo, el precio del F-35 es prohibitivo para países como España (por encima de los 100 millones de dólares la unidad) y sus problemas acaecidos (este viernes se suspendieron los vuelos en una base estadounidense por problemas de oxígeno) hacen que aún sea políticamente incorrecto tomar una decisión al respecto o, incluso, ponerlo encima de la mesa por mucho que desde lás cúpulas militares se trate de presionar.

Airbus DS propone un Futuro Sistema Aéreo de Combate capaz de adaptarse e interactuar con aviones no tripulados y con otros aviones de combate de los ejércitos, explicó Fernando Alonso, quien reconoció también que se encuentra en negociaciones con los gobiernos de Alemania y España. Ahora falta que Francia (y Dassault) quieran sumarse al proyecto. De no sumarse Francia, parece claro que Airbus DS sería reacio a emprender un proyecto inviable solo para dos países. Ello supondría la merma de soberanía militar, desarrollo industrial y tecnológico en el campo de la aviación de combate en la UE. Eso es una realidad.

Dos aviones de combate franceses Rafale, en una misión en Irak el pasado 21 de septiembre /ARMÉE DE L'AIR

Ni que decir tiene que el hándicap del proyecto de Airbus DS es que aún es eso: un proyecto por diseñar. Mientras que el F-35 vuela, forma parte de los escuadrones de más países e incluso habría llevado a cabo alguna acción militar, cómo se ha informado del F-35 israelí.

¿Cuál será la solución que adopte España? ¿Puede haber una solución intermedia para el Ejército del Aire como una flota de F-18 renovada? ¿La Armada reemplazará los Harrier con F-35 de despegue vertical o se quedará sin la capacidad de ala fija embarcada en el buque Juan Carlos I? He aquí las decisiones a tomar. Desde Airbus apremian a tomar una decisión: «Es el momento para hacerlo y diseñarlo en Europa», subrayó Alonso, quien confía y mira ahora a Francia. (Jesús.R.G.)


Sigue todas mis noticias a traves de mis paginas oficiales en Twitter y Facebook         

Comentarios