El nuevo avión de vigilancia de la Armada de EE.UU. está lleno de defectos.


El resultado del informe anual sobre las principales armas, por Michael Gilmore, jefe de la oficina de evaluación del Pentágono, ya ha aparecido en las noticias. Aunque el informe no utiliza la palabra fracaso, que representa el nuevo avión de Boeing P-8A Poseidon aún no sólo eficaz en dos de sus principales misiones: la guerra antisubmarina (ASW) y de reconocimiento áreo. Los defectos en el programa de varios millones de dólares (en realidad, de 35 mil millones de dólares esfuerzo) son casi todas partes: radar, integración de sensores, la transferencia de datos. Según Bloomberg News, Gilmore dijo que la nueva aeronave muestra "todas las principales deficiencias detectadas en los ejercicios anteriores, cuando se somete a las pruebas más estresante de combate realista desde septiembre 2012 hasta marzo 2013." Por esta razón, el P-8A "no es eficaz para la misión de inteligencia, vigilancia y reconocimiento, y no es eficaz para el área amplia de búsqueda antisubmarina." Obviamente, por lo menos algunos de los problemas pronto se soluciona, pero los informes pone de relieve que el P-8A está lleno de sensores que no están listos para ser desplegados y utilizados en combate, simplemente porque sería un fracaso en el seguimiento de subsmarinos chinos. 

Sin embargo, la Armada de los EE.UU. ya ha desplegado seis P-8A (de 13 entregado hasta ahora) a Japón para llevar a cabo esa misión. Hasta ahora, los comentarios de la Armada en el plano siempre han sido positivos y esta es también la postura oficial de Boeing, que también ha dicho que se trabajará estrechamente con el servicio para resolver cualquier problema que surja. Aunque la oficina de ensayo encontró que, en la actualidad, el P-8A proporcione las mismas áreas pequeñas capacidades de búsqueda que el P-3C Orion está reemplazando poco, el Poseidón es un sistema de armas muy jóven, por lo que es proporciona a la Armada de los EE.UU. una mayor fiabilidad, mantenibilidad y disponibilidad con un rango de aumento, de carga útil y de velocidad. El problema no está en la estructura del avión, pero con los sensores costosos que deberían ser el verdadero valor añadido de los nuevos aviones: radar y ESM (Medidas de Apoyo Electrónico) que hacen tanto ASW e ISR (Inteligencia de Vigilancia de Reconocimiento) misiones posibles. Estos se fijarán en los próximos meses. La Armada de EE.UU. planea operar una flota de 113 P-8A Poseidon aviones de patrulla marítima próxima generación. 


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