Hezbollah envía nuevos combatientes a sangrienta batalla en Siria.

Batalla de Qusayr Hezbollah envía nuevos combatientes a  sangrienta batalla en Siria


En una escalada por separado, las fuerzas israelíes y sirias intercambiaron disparos en los Altos del Golán, con el ejército sirio alegando que destruyó un vehículo militar israelí, que cruzó la línea de armisticio. Los acontecimientos se produjeron después de que El presidente Barack Obama expresó su preocupación a Beirut sobre el creciente papel de Hezbolá en el conflicto, y el Departamento de Estado advirtió que el conflicto se derrama por toda la región. La batalla por Qusair, en la provincia central de Homs, se extendió durante un tercer día después de Assad leales lanzaron una ofensiva para recuperar la ciudad más de un año después de que los rebeldes se apoderaron. 

El Observatorio Sirio para los Derechos Humanos, un grupo activista con sede en Gran Bretaña, dijo que Hezbollah estaba dirigiendo los ataques en el suelo mientras aviones de guerra de Assad llevan a cabo ataques aéreos. “Es Hezbollah claramente está liderando el asalto,” El director Observatorio Rami Abdel Rahman dijo a la AFP, añadiendo que “gran parte de la ciudad está ahora destruida”. Una fuente cercana al grupo libanés dijo a la AFP que “Hezbollah ha enviado nuevas tropas de élite a Qusair” y sus canales de televisión transmitieron imágenes de los funerales de cinco miembros, según dijo, fueron asesinados el cumplimiento de su “deber yihadista”. El Observatorio dijo que al menos 31 combatientes de Hezbolá han muerto en la batalla por Qusair desde el domingo, al igual que 70 rebeldes, nueve soldados, tres combatientes paramilitares y cuatro civiles. Assad y Hezbollah han hecho recuperar Qusair, que se encuentra entre la ciudad siria de Homs y Trípoli, en el norte de Líbano, una de las prioridades en la lucha para cambiar el rumbo contra la insurgencia de dos años. 

“Es importante para los sirios, los iraníes y Hezbollah poder controlar la ruta” que une Trípoli a Siria, el analista libanés Waddah Sharara dijo a la AFP. Trípoli, que tiene una mayoría musulmana sunita, ha sido un bastión de los rebeldes sunitas de Siria, y algunos de los residentes de la ciudad libanesa se han unido a la insurrección armada. Escena de frecuente violencia en Siria ligada, también es el hogar de una minoría de los alauitas, una rama del Islam chiíta a la que pertenece Assad. El régimen sirio también considera Qusair de importancia estratégica, ya que “tiene que mantener su territorio y el poder de Damasco a la costa”, según Sharara. Del Observatorio Abdel Rahman describió la respuesta rebelde al asalto en Qusair como “feroz”, pero expresó su preocupación por la suerte de unos 25.000 civiles atrapados. Pro-régimen diario Al-Watan dijo que mientras tanto los leales habían tomado el control de todos los edificios oficiales de Qusair y “levantado la bandera de Siria” por encima de ellos. El portavoz del Departamento de Estado Patrick Ventrell condenó Hezbollah y dijo que sus acciones en Siria “e inflaman exacerban las tensiones sectarias regionales y perpetúan la campaña de terror del régimen”. Aunque su gobierno ha adoptado una postura de neutralidad, el pueblo del Líbano están profundamente divididos sobre la guerra en Siria. 

 Hezbollah ha enviado combatientes para apoyar al régimen, que durante años ha facilitado el transporte de armas de Irán al grupo libanés. Los temores de un contagio regional también subieron Martes después de las reclamaciones del ejército de Siria, que destruyó un vehículo militar israelí después de que cruzó la línea de alto el fuego del Golán. “Nuestras fuerzas armadas han destruido un vehículo israelí que con todo lo que tenía en … El vehículo había cruzado la línea de alto el fuego y se movía hacia el pueblo de Bir Ajam, situado en la zona sirio liberado” del Golán, la declaración del ejército dijo. El régimen de Damasco ha culpado constantemente a las potencias extranjeras, incluyendo a Israel, por el conflicto en Siria. Pero su principal aliado regional de Irán dijo que estaba dispuesto a asistir a una conferencia de paz en Ginebra propuesto por Rusia y Estados Unidos. “La condición para el éxito en Ginebra es que todos los países con influencia sobre los acontecimientos en Siria participar”, dijo el portavoz del Ministerio de Relaciones Exteriores Abbas Araqchi. La conferencia – que se espera que se celebrará en la primera quincena de junio – trata de encontrar una solución política al conflicto, que ha matado a más de 90.000 personas desde que estalló en marzo de 2011.

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