Uno de cada diez cadetes de la Academia de Zaragoza ha abandonado antes del primer mes. La instrucción militar asusta a los candidatos llegados a través de la selectividad.


El periodo de adaptación a la vida militar que deben pasar los cadetes de ingreso directo –provenientes de la selectividad- ha mellado las aulas de la Academia General militar. Al menos uno de cada diez ha solicitado la baja a petición propia. Según ha podido saber El Confidencial Digital de fuentes militares relacionadas con la enseñanza militar, estas bajas se han producido en todas las Academias –la del Aire de San Javier, la de la Armada de Marín-, pero han alcanzado niveles preocupantes en Zaragoza. Las primeras se produjeron nada más comenzar el curso, cuando diez de los alumnos de acceso directo –llegados a través de la selectividad- no se presentaron o informaron de su renuncia. La mayoría optaban al Cuerpo General del Ejército de Tierra. 

El número de abandonos registrado fue mayor, según ha sabido ECD, durante la denominada fase de acogida, orientación y adaptación a la vida militar. En total, las fuentes consultadas aseguran que las bajas solicitadas a petición propia durante esta fase han superado el 10 por ciento de los alumnos de primer curso. En este periodo de adaptación, los cadetes recién ingresados experimentan en primera persona cómo vive y actúa un militar: relación con los mandos, cuestiones disciplinarias, horarios, etc… Finalizada esa fase, que dura alrededor de un mes, comienza la formación académica específica. Las bajas se han producido entre aquellos cadetes que ingresaron en la academia de Zaragoza a través del acceso directo, y no por el método de promoción directa –militares que llevan años en las Fuerzas Armadas-. Se da la circunstancia que cada año se destinan más plazas al acceso directo que a la promoción directa, por lo que muchos aspirantes procedentes de esta última vía se han quedado fuera.

Fuente: http://elconfidencialdigital.com/

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